Acudiendo como ciencias auxiliares a la Filosofía y a la Psicología, el Análisis Transaccional, nos habla de que el autoamor es actuar desde uno mismo. Creer en sí mismo.
Como persona, el hombre es un valor absoluto, único e insustituible; esa parte es su ser le viene dada por su naturaleza; pero él tiene que añadir su contraparte, para ser honesto con su misma existencia. Y esto es, creer en sí y poner a rendir sus capacidades y sus valores al servicio de los demás. En definitiva, la sociedad nace para que los individuos se auxilien los unos a los otros, ese es su más básico y elemental origen.
La vida es un don, que siendo vida honrada y justa, es un don que devolvemos a los demás, como la energía, que positiva o negativa tiene efecto bumerang. La vida, el alma, que da origen a la existencia de una vida, ha sido definida por los expertos en la materia, como Antonio Blay, Jesús García Vadillo, Willillys Jäger, como un complejo o un conjunto de energía + amor + inteligencia. Según esto podemos decir que hay hombre COMPLETO, cuando al don que nos viene dado por naturaleza se añade el don del hombre mismo, su autoconciencia positiva.
“Del por qué el acosador se hace con una cohorte de colaboradores frente a la víctima”
Calderón Berrocal, María del Carmen